En un pequeño pueblo llamado Pihuamo, un comando armado decidió darle un giro emocionante a las elecciones. No, no estamos hablando de una película de acción, sino de la vida real. Resulta que estos audaces ladrones se llevaron dos paquetes electorales como si fueran tesoros escondidos. ¿Quiénes son? ¿Un grupo de villanos o simplemente fanáticos del voto secreto? Nadie lo sabe con certeza, pero sí sabemos que no hubo explosiones ni persecuciones a alta velocidad. ¡Una verdadera lástima para los amantes de la adrenalina!

La presidenta del Instituto Electoral y de Participación Ciudadana (IEPC), Paula Ramírez, comentó: «No hay forma de recuperar los paquetes robados. Fueron sustraídos por personas al parecer armadas. No hubo ningún ataque, simplemente se los llevaron y desde luego vamos a presentar las denuncias correspondientes». Parece que los ladrones se llevaron los paquetes sin siquiera pedir permiso. ¿Dónde quedaron los buenos modales?

Pero eso no es todo. También tenemos un paquete electoral retenido. Sí, sí, como en una película de suspense. Los funcionarios de casilla no pudieron acceder a él, como si estuviera protegido por un campo de fuerza invisible. ¿Será que los extraterrestres también están interesados en las elecciones locales? Quién sabe.

Y para agregar un poco de drama, un cuarto paquete de elección de munícipe se extravió. El capacitador electoral lo llevaba en sus manos, pero al parecer, la gravedad decidió intervenir y hacerlo caer. ¡Ups! Imagínense al paquete electoral rodando por las calles de Jalisco como una pelota traviesa. ¿Quizás deberíamos organizar una búsqueda del tesoro para encontrarlo?