¡Bienvenidos a la explosión cromática de Guadalajara! Donde la primavera no solo trae vida, sino un espectáculo de colores que transforma las calles y avenidas en un lienzo vivo.

Rosa Morada, la belleza insignia de América Latina, se alza majestuosa con sus flores de tonos rosados y corazón verde. Un gigante gentil que adorna desde El Salvador hasta Perú, y que en la ciudad alcanza los 10 metros de pura elegancia.

Tabachín, el artista flamboyante, despliega su paleta de rojos y anaranjados, creando un contraste vibrante contra el verde de sus hojas. Este trotamundos crece en tierras tan diversas como México y España, y hasta en la lejana Australia.

Lluvia de Oro, el pequeño ornamental, cuelga sus racimos amarillos brillantes como joyas que adornan el paisaje urbano, una verdadera lluvia de destellos dorados.

Jacaranda, con su infinita variedad, es la poesía visual de la ciudad. Sus flores azul violáceo pintan el cielo de Guadalajara con pinceladas de morado, rosado y azul, en un baile de matices que enamora la vista.

Y finalmente, Guayacán, el nativo americano, cuyo esqueleto se viste de flores amarillas que, al caer, tejen una alfombra otoñal que es un festín para los ojos.

Así que, ¡prepárate para la caza de colores! Encuentra estos cinco símbolos de la perla tapatía, captura su esplendor con tu cámara y comparte la magia en tus redes sociales.

¡Es una temporada para celebrar la vida, la naturaleza y la belleza que nos rodea!