La pandilla de jueces de la Jufed se puso sus mejores galas para expresar su «preocupación» por la movida de Ricardo Monreal Ávila y su intento de reformar la Ley de Amparo. Según estos magistrados rockstars, limitar las suspensiones provisionales o definitivas contra leyes del Congreso suena a fiesta exclusiva donde solo los más «cool» tienen acceso, dejando a los grupos vulnerables en la puerta.

En un tono medio burlón, la Jufed le recordó a los legisladores que jugar con las reglas constitucionales es como andar en una cuerda floja, especialmente cuando se trata de los derechos humanos. Según ellos, quitarle el derecho al juez de ayudar a los afectados por leyes inconstitucionales sería como prohibirle a Superman volar en beneficio de la humanidad.

Además, estos magistrados rebeldes enfatizaron que el juicio de amparo es como la varita mágica que les permite a ellos decidir quién se porta mal con los derechos humanos. ¡Pero ojo! La suspensión provisional no es juzgar la constitucionalidad de una ley, ¡es más bien como ponerle un alto antes de que se arme un alboroto!

En resumen, la Jufed dejó en claro que no están para juegos y que defenderán el principio de progresividad de los Derechos Humanos con uñas y dientes. ¡Que tiemble Batman ante estos defensores de la justicia!