El fiscal general de Estados Unidos, Merrick Garland, anunció el miércoles que su país buscará la entrega desde México de los hijos restantes del narcotraficante Joaquín «Chapo» Guzmán, quienes son conocidos como los «chapitos», después de obtener la extradición de Ovidio Guzmán López.

Garland expresó ante el Comité Judicial de la Cámara de Representantes que, sin duda alguna, buscará la extradición y detención de todos los hijos del narcotraficante mexicano, quien actualmente cumple una condena de cadena perpetua en Estados Unidos.

Joaquín «Chapo» Guzmán, líder del cártel de Sinaloa, tiene cuatro hijos que están vivos: Ovidio Guzmán, quien fue extraditado a Estados Unidos el pasado 15 de septiembre, Iván Archivaldo Guzmán, Jesús Alfredo Guzmán y Joaquín Guzmán. El quinto hijo, Édgar Guzmán, el primogénito, fue asesinado en 2008.

Los cuatro hijos sobrevivientes del narcotraficante son conocidos como los «chapitos» y han sido acusados por Estados Unidos de transportar sistemáticamente grandes cantidades de cocaína desde y a través de América del Sur y Central hasta Estados Unidos.

Cuando se le preguntó sobre la colaboración de México con Estados Unidos para lograr la extradición de los «chapitos», Garland se abstuvo de calificarla como buena y simplemente indicó que la cooperación podría mejorar.

«Es evidente que han trabajado con nosotros en relación con Ovidio. Su captura por parte de las autoridades mexicanas resultó en la muerte de un número significativo de marinos mexicanos», reconoció Garland.

«Afirmaría que siempre existe margen para mejorar la cooperación. Estamos enfrentando un grave problema con el fentanilo que llega desde México y se fabrica allí», añadió el fiscal general.

«Personalmente, he viajado a México en dos ocasiones en un intento por obtener una mayor cooperación», concluyó Garland.