«El Circo Político de Jalisco: Acrobacias Verbales, Chismes y Malabares Electorales»


¡Ah, el circo político nunca decepciona!…
En el primer acto del gran espectáculo de la gubernatura de Jalisco, los aspirantes se lanzaron al ruedo con más acrobacias verbales que propuestas concretas. ¿Quién necesita explicaciones cuando puedes tener un buen chisme, verdad?
Pablo Lemus, el mago de Movimiento Ciudadano, sacó de su sombrero no un conejo, sino una foto de Claudia Delgadillo, la domadora de Morena, en una exótica escapada a Dubái con el ilustre fundador de la financiera AJP, famosa por su acto de desaparición… de dinero.
Claudia, no queriendo quedarse atrás en el truco de magia, reveló su propia versión de la foto, pero con un giro: ¡tachán! Pablo también estaba allí. Pero claro, él solo pasaba por ahí, invitado a un evento tan casual como la donación de órganos, donde, por pura coincidencia, se tomó la foto.
Laura Haro, la equilibrista de la alianza PRI-PAN-PRD, decidió no quedarse en la cuerda floja y se lanzó al vacío con una playera que decía “Fosforena”. Porque, ¿quién necesita propuestas de seguridad cuando puedes tener merchandising político?
Los ataques volaron como malabares. Lemus lamentó que sus contrincantes se colgaran de figuras nacionales como si fueran trapecistas, mientras Delgadillo insistía en que Pablo era un “Pinocho mentiroso” – porque en política, si vas a insultar, que sea con un clásico de la literatura infantil.
Laura Haro se mofó de la coalición de Delgadillo llamándola “Frankenstein”, lo que es bastante irónico considerando que todas las campañas políticas son un poco monstruosas. Delgadillo, por su parte, se sintió atacada y acusó a Laura de ser “muy grosera”, porque en el ring de la política, todos los golpes son bajos.
Y al final, en un sondeo tan científico como leer las hojas de té, resulta que casi cuatro de cada diez personas ya decidieron su voto. Los demás, probablemente estaban demasiado ocupados disfrutando del espectáculo para preocuparse por algo tan mundano como un debate político.