«Ébola regresa al escenario en la República Democrática del Congo: el brote número 16, ¿por qué no?»
La República Democrática del Congo ha declarado su decimosexto brote de ébola, como si fuera una serie interminable. Esta vez, el virus ha dejado 16 muertos (incluidos cuatro trabajadores de la salud) y hay 28 casos sospechosos en espera.
El ministro de Salud Pública, Samuel Kamba, anunció que la tasa de letalidad es del 57%, lo que significa que más de la mitad de los infectados no lo cuentan. Pero no se alarmen, porque “las cifras son provisionales” y, honestamente, rara vez cambian para mejor.
Mientras tanto, el gobierno activa su protocolo habitual: búsqueda de casos, monitoreo de contactos y campañas de sensibilización. Todo muy eficiente, si no fuera porque también lidian con brotes de mpox, cólera, y una escasez de ayuda internacional que parece más contagiosa que el virus.
Así que, en un mundo que sigue girando, el ébola en RDC sigue siendo ese clásico que nadie pidió. ¿“Nueva normalidad”? ¡Por supuesto!