«Alemania y su tren descarrilado: cuando el viaje termina antes de llegar»

Lo que debía ser un tranquilo recorrido por Baden-Württemberg se transformó en una escena digna de una película de desastre, sin efectos especiales. Un tren con al menos cien pasajeros se salió del guion (y de las vías), dejando tres muertos y 34 heridos. Porque, claro, ¿quién necesita adrenalina con la infraestructura ferroviaria y el clima extremo?

Las primeras investigaciones indican que un desprendimiento de tierra lanzó escombros sobre las vías. El ministro regional del Interior, Thomas Strobl, llegó al lugar como quien llega tarde a una fiesta descontrolada, mientras el canciller Friedrich Merz expresó su “conmoción” y pidió apoyo a los equipos de rescate; es decir, el caos ya está servido.

La portavoz de la policía informó que “se ha producido un accidente ferroviario… hay varios heridos… se desconocen las causas”. Spoiler: los escombros en las vías no son parte del itinerario.

Alemania, conocida por su puntualidad, esta vez se topó con un descarrilamiento que ni el mejor reloj suizo pudo prever. Y mientras se buscan respuestas, el país se pregunta si el próximo viaje incluirá casco y seguro de vida.