En el emocionante episodio de «México contra el reloj», el gobierno se enfrenta a la presión de cumplir con un tratado de agua con Estados Unidos. Porque, ¿por qué no esperar hasta el último momento para hacer lo que ya sabíamos que teníamos que hacer?

El especialista Jorge Ramírez Hernández advierte que habrá que pedir a los usuarios que consuman menos para garantizar el suministro a Texas. ¡Qué gran estrategia! Este acuerdo, que busca evitar tensiones en temas como los aranceles y el T-MEC, exige transferencias inmediatas de agua. El pequeño detalle: el agua escasea más que un buen plan en una reunión.

Así que ahí lo tienen, otro desafío donde México debe hacer malabares para cumplir sus compromisos internacionales. ¿Logrará salir bien librado o terminará con sanciones? Por ahora, la incertidumbre sigue fluyendo… como el agua… o mejor dicho, como su ausencia