En un espectáculo digno de un circo, un avión de Delta Airlines decidió que aterrizar normalmente era muy aburrido y terminó patas arriba en el Aeropuerto Internacional Pearson. Resultado: 19 heridos y una anécdota para recordar.

El vuelo, proveniente de Minneapolis, se convirtió en un drama aéreo cuando el CRJ-900 aterrizó de manera «extremadamente desafortunada». Las autoridades canadienses confirmaron que todos los pasajeros fueron evacuados, aunque dos adultos y un niño fueron trasladados a hospitales. Porque, claro, ¿qué es un viaje familiar sin un poco de emoción en ambulancia?

El aeropuerto estuvo cerrado más de dos horas, causando caos en los vuelos. La FAA y la Junta de Seguridad en el Transporte de Canadá están investigando este «misterio aéreo», porque necesitamos a los mejores detectives para entender cómo un avión se convierte en una atracción turística.

Mientras tanto, los pasajeros afectados probablemente estén reconsiderando sus opciones para futuros viajes. Otro día emocionante en la aviación donde un aterrizaje puede ser más que solo un aterrizaje. ¡Esperemos que el próximo vuelo sea menos… acrobático!