«El Autobús del Horror: ¡Cuando la Ruta se Convierte en Pesadilla!»
En una escena digna de una telenovela de terror, las autoridades guatemaltecas confirmaron el martes 11 de enero la muerte de un mexicano en un accidente de tráfico ocurrido el lunes en el norte de la capital. ¡Así es, 54 almas perdidas en un viaje que se convirtió en un verdadero horror!
La Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) de México también confirmó la muerte de Germán Hernández, cuyos restos aún no han sido entregados a su familia debido a su ausencia en las instalaciones forenses. ¡Qué conveniente!
El consulado, en un comunicado que suena más a disculpa tardía, anunció que solo este martes se enteraron del fatal desenlace. La Cancillería expresó sus condolencias, porque nada dice «lo sentimos» como un comunicado formal.
Hernández residía en Llano Largo y viajaba diariamente para trabajar en una empresa de blindaje de vehículos. Ahora, el consulado promete repatriar sus restos.
Y como si esto no fuera suficiente, se reveló que el joven chófer de 24 años al volante no tenía licencia para conducir autobuses. Una pequeña infracción que desató una gran tragedia.
Así queda este accidente: más preguntas que respuestas y un recordatorio sombrío de las ironías de la vida.