«Sara: La Tormenta que Dejó Huella y Lloros en Centroamérica»

La tormenta tropical Sara ha decidido dar su último espectáculo en Honduras antes de evaporarse en la madrugada del lunes, dejando a su paso un impresionante currículum de destrucción: dos vidas perdidas, más de 123 mil personas afectadas y cerca de 1,800 comunidades aisladas. ¡Qué manera de despedirse, Sara!

En El Salvador, la tormenta no se quedó atrás. También cobró dos vidas y desató lluvias torrenciales e inundaciones en varios países de Centroamérica. La vicepresidenta nicaragüense, Rosario Murillo, con su habitual estilo teatral, anunció en una transmisión oficial que Sara impactó a 50 municipios. Las víctimas incluyen a un joven de 25 años que fue arrastrado junto a su motocicleta al cruzar un puente y un niño de 8 años que fue llevado por la corriente mientras montaba a caballo con su abuelo. ¡Trágico y dramático, como una película de terror!. También informó que 1,601 viviendas fueron anegadas y 735 familias evacuadas. En Honduras, uno de los fallecidos fue un niño de solo 3 años, cuyo cuerpo fue encontrado río abajo y entregado a su madre. El otro fallecido, un hombre de 47 años, sufrió un destino similar en el municipio de Sabá. ¡Menuda escena!

Los remanentes de Sara continuarán haciendo de las suyas con más lluvias, posibles crecidas de ríos y deslizamientos de tierra en varias zonas. Así que sí, la tormenta se ha disipado, pero la pesadilla apenas comienza. En Honduras, el Centro Nacional de Estudios Atmosféricos, Oceánicos y Sísmicos (CENAOS) advierte que los remanentes seguirán trayendo lluvia y actividad eléctrica en el sur y suroccidente. ¡Como si no tuviéramos suficiente diversión!

Mientras tanto, en El Salvador se habilitaron 170 albergues y se distribuyeron paquetes alimenticios a los afectados; en Guatemala atendieron 57 emergencias relacionadas con inundaciones.

Así que ya lo saben, amigos: manténganse informados y preparados para cualquier eventualidad. ¡Que siga el show natural!