«Militarizando la Seguridad: La Nueva Moda en el Congreso»
Con un aplastante 362 votos a favor y solo 133 en contra, la Cámara de Diputados decidió que no hay mejor manera de garantizar la seguridad que dándole más poder a los militares. ¡Bravo! La reforma a la Guardia Nacional, impulsada por Morena y sus incondicionales, promete hacer que los soldados se sientan como en casa en el ámbito civil.
Ahora, la Guardia Nacional se integrará a las actividades de la Secretaría de Defensa Nacional (Sedena), porque, ¿quién necesita una separación entre lo militar y lo civil? Desde supervisar aduanas hasta construir obras y transportar combustible, los militares estarán tan ocupados que probablemente se olviden de las cosas triviales como la violencia. ¡Qué alivio!
Por supuesto, los opositores están alzando la voz, argumentando que esto podría ser un paso más hacia la militarización total de nuestra seguridad pública. Pero no se preocupen, los defensores de la reforma aseguran que es un «movimiento necesario» para enfrentar esa creciente violencia. Porque claramente, más uniformes y armas son la solución mágica que todos estábamos esperando.
Mientras tanto, el país sigue observando con una mezcla de incredulidad y resignación cómo se desarrollan las próximas sesiones del Congreso. ¡Qué emocionante!