«El Regreso del Puente: Construcción, Risas y Fantasmas en el Camino»

Después de 17 días de construcción (que honestamente parecían más un episodio de “¿Quién construye este puente?” que una obra de infraestructura), el gran David Miguel Zamora Bueno, maestro de ceremonias de la Secretaría de Infraestructura y Obras Públicas (SIOP), ha anunciado la reapertura del puente. Sí, señoras y señores, ¡los coches podrán volver a desfilar por la avenida López Mateos como modelos en una pasarela de moda!

Zamora Bueno, con la seriedad de un presentador de reality show, declaró: “El gobernador está tan emocionado que está revisando su agenda. Si las estrellas se alinean y el horóscopo lo permite, la gran inauguración será a las cinco de la tarde.”

Pero no todo es risas y aplausos. María Elena González Ruíz, presidenta del Consejo Directivo del Colegio de Arquitectos y Urbanistas del Estado de Jalisco AC, decidió ser la voz de la razón. Con un tono que podría hacer temblar a un ingeniero, exclamó: “¿No se les ocurrió consultar a alguien más? Porque, claro, la transparencia es como un unicornio en el mundo de la construcción.” Y aunque admitió que el nuevo puente no se derrumbará como un castillo de naipes, advirtió sobre los peligros ocultos: filtraciones de agua y socavones acechando como fantasmas resentidos.

¿Cómo lograron este milagro? Instalaron losas de acero y vigas, como si estuvieran armando un rompecabezas gigante. El SIAPA también hizo su parte, lidiando con tuberías y válvulas como auténticos héroes anónimos. ¡Bravo, SIAPA!

La inversión total ronda los 80 millones de pesos, porque cada centavo cuenta. El gobernador afirmó: “El socavón se dio porque se cayó un puente”. Así que, si pensabas que había más problemas ocultos, ¡sorpresa! Todo está bajo control… o eso dicen.

Así que, queridos conductores, prepárense para volver a transitar por esta vía renovada, donde cada bache es una historia y cada socavón un recuerdo lejano. Hasta el próximo gran evento, cuando el semáforo se quede sin pilas o el paso peatonal organice una fiesta rave. ¡Nos vemos en las calles, donde la realidad supera a la ficción!