«Luces y sombras: crónicas de un apagón inolvidable en Guadalajara»
Después de una tormenta que hizo temblar a la Zona Metropolitana de Guadalajara, con árboles cayendo como fichas de dominó y la electricidad jugando al escondite en casas, negocios y farolas, varias colonias seguían en la oscuridad como si estuvieran de moda. ¡Qué situación tan encantadora para un paseo nocturno sin luces!
Mientras algunos van recuperando el tan ansiado servicio eléctrico, hay familias que esperan como si estuvieran en un concurso de resistencia. Por ejemplo, Claudia Serrano, vecina de la Colonia 18 de Marzo, tiene una pequeña hija con más problemas que el manual de instrucciones de un mueble sueco. ¡Imagina tener que cargar la batería para comer!
Otra historia trágica es la de Angélica, residente de la Colonia Paseos del Sol. «Nos quedamos sin luz, sin agua y nos dicen que es un maratón de cuatro a cinco días para volver a la normalidad. ¡Qué emoción! 40 familias en apuros gastronómicos… ¡una fiesta!»
Según la Comisión Federal de Electricidad, casi 15 mil personas en Guadalajara se unieron al club de los apagados por los vientos rebeldes, la lluvia caprichosa y los árboles suicidas.
Hasta el último recuento, el equipo de la CFE ha devuelto la luz a casi 14 mil personas, logrando un 93% de eficacia. «Los rezagados aún a oscuras se deben a daños graves causados por árboles kamikaze», confirmó la CFE entre suspiros.
Según las redes sociales chismosas, las colonias Jardines del Sol, La Calma, Las Águilas y el Colli Urbano siguen con su modo «velas y linterna». ¡Una experiencia inolvidable para contar a los nietos!